me tiendo
en la hamaca del viento
para decir a solas
lo que nunca he sentido
oigo girar los mundos
y llorar corazones
que nunca he conocido
soy un sembrado de palomas blancas
soy la hoja más alta
de un eucalipto verde
y la cumbre pelada
de la madrugada
dorada de luz fría
tengo en mi corazón gusanos
y en mis manos monedas
de malicia
mis cabellos son redes
y mis ojos carbones
y los lápices todos
se quiebran
al peso de mi nombre
te quiero te quiero no te quiero
las blancas margaritas como soles
giran
giran
una lluvia de pétalos me cubre mis ojos se cierran y duermo
y me hundo lentamente
en un sueño
infinita
mente
dulce